Ferrocarriles de Antofagasta

Cobija, nacimiento y desarrollo del principal puerto/ Antofagasta al inicio de la guerra del Pacifico/ José Díaz Gana y el descubrimiento de Caracoles/ La Compañía Minera Huanchaca/ Los orígenes de Taltal/ Mejillones y el guano/ Ferrocarriles de Antofagasta.

Los ferrocarriles que servían a los territorios interiores o  hinterland de la antigua provincia de Antofagasta eran cuatro, los del puerto de Tocopilla, Antofagasta, Coloso y Taltal. Estos trenes ejercían en la pampa el mismo papel que hacían en el sur los ríos navegables, donde los centros poblados y las empresas industriales se localizaban a sus orillas. Eran como espinas dorsales de un sistema de ordenamiento territorial. Con el tendido de estas vías, los terrenos cercanos sus ejes se valorizaban, ejerciendo un enorme podaren el valor de remate de los terrenos que ponía en oferta el Fisco. Influía también en la factibilidad de operación de una mina y en su estructura de costo, yaqué el transporte era un elemento de alta incidencia, tanto por el despacho de los minerales a los puertos desembarque como por los insumos que se importaban llegaban a las oficinas mediante el ferrocarril. De este modo, aquellas oficinas con yacimientos de bajas leyes y alejadas de estas líneas estaban condenadas desaparecer por los altos costos de transporte.

Estos ferrocarriles operaron durante varios años con máquinas a vapor, por lo cual las necesidades de agua a lo largo de las líneas eran muchas e imposibles de reemplazar, disminuyendo así la capacidad descarga de los trenes, que estaban obligados a llevar consigo reservas de agua y de carbón. Para eso, en las estaciones donde habían máquinas re sacadoras, sedeaba un depósito para el agua de la locomotora, quela empresa pagaba a alto costo. El mismo problema de la escasez de agua en el transporte influyó paraqué muy pronto, en la medida que la tecnologías perfeccionaba, los camiones a gasolina fueran desplazando a las carretas tiradas por mulas o bueyes, animales que requerían alimento y agua, lo cual también hacía que el carretero ocupara parte del espacio de carga para llevar estos elementos parases animales. Luego de 1888, cuando se creó oficialmente la provincia de Antofagasta, los permisos exclusivos para construir líneas de ferrocarriles empezaron ejecutarse rápidamente, dando servicio a las numerosas oficinas salitreras que nacían y sedes perdigaban por las pampas, al igual que las minase plata y cobre que operaban en distintas partes de este amplio territorio.

El ferrocarril de Antofagasta a Boliviana historia del Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia está íntimamente ligada a la Empresa Minera de Huanchaca, por lo cual es necesario referirse a ella. La mina Pula cayo, del departamento de Potosí, en Bolivia, aunque era explotada desde la época del coloniaje, fue dada a conocer recién en el siglo XIX por Mariano Ramírez, minero infatigable y experto, quien conociendo su valor, no cesó de trabajarla y formó una sociedad en 1830 para explotarla con capitales reunidos por sus socios. Luego, en 1872, Aniceto Arce, uno de los socios de este yacimiento, invitó a visita resta mina asombrosa a sus amigos chilenos Melchor Concha y Toro, Javier García Huidobro y a Gregorio Donoso, de modo que al regreso, con el entusiasmo provocado por la visita, se formó en Valparaíso, el 1de enero de 1873 la Compañía Huanchaco de Bolivia. Desde el primer año de su explotación, la Compañía obtuvo magníficos resultados. Pero la empresa tropezaba con la dificultad inmensa de los precios de los transportes para mover sus minerales, por el alejamiento de Pula cayo de la costa, lo que impedía explotar minerales con ley inferior a 50 marcos por cajón, esto es 5 partes por mil.

Basta señalar la ruta que seguía la carga para aquilatar esta dificultad: se exportaban los minerales por el puerto de Cobija, recorriendo las carretas 500kilómetros y empleando en su trayecto nunca menos de 18 días. Después, con motivo de la Guerra del Pacífico, la gerencia tuvo que buscar la salida de los minerales por el Atlántico, por el camino a Rosario, en Argentina, para ser embarcados por el río Paraná hasta Buenos Aires y de ahí a Europa. Concluida la guerra, se restableció el tráfico por el Pacífico, pero habilitándose, no ya a Cobija como puerto, sino a Antofagasta. Esto fue lo que hizo pensar al Directorio de Huanchaco en la necesidad de construir un ferrocarril, que viniera a reemplazar el primitivo y costosísimo transporte por carretas. Por el otro lado, la Compañía de Salitres de Antofagasta había obtenido del Gobierno de Bolivia, la concesión de una extensión del primitivo ferrocarril al Salar del Carmen hasta Pampa Alta (km. 150). Ya había construido más de 100 kilómetros, cuando se le asoció al trabajo la Compañía Minera de Huanchaca, bajo la base de prolongarlo hasta Pula cayo. Definidla Guerra del Pacífico a favor de Chile, y habiendo quedado la provincia de Antofagasta en su poder, ambas Compañías obtuvieron del Gobierno chileno la concesión el 17 de enero de 1884, para prolongar la línea hasta Alcotán (km. 360).Sobrevinieron después dificultades entre ambas empresas, y entonces la Compañía de Huanchaco, más interesada en la prosecución de la obra, compró a lado Salitres sus derechos en el ferrocarril e imprimió gran actividad en los trabajos de construcción. En1888 se modificó el trazado primitivo, fijándose para el paso de la línea divisoria de Chile con Bolivia, moya el kilómetro 366 del proyecto de Jorge Harding, sino en el kilómetro 442.

Pero los múltiples trabajos emprendidos simultáneamente por la Compañía deHuanchaca, como la construcción del ferrocarril, tacañería para la dotación de agua en las estaciones, las instalaciones en las minas y la no menos preocupante baja del precio de la plata en el mercado internacional, hicieron difícil su situación económica, por lo cual el Directorio resolvió desprenderse del ferrocarril, traspasándolo a una Compañía que expresamente deformó en Londres, Te Antofagasta (Chile) and BoliviaRailway Cº Ltd., reservándose su arriendo exclusivo por 15 años. Mientras tanto los trabajos no habían sido interrumpidos: en 1890 llegaba la locomotora a Uyuni (km.610) y en abril de ese año se terminaba el ramal de Uyuni a Pulacayo, de 38 kilómetros, consiguiéndoseos el principal objetivo que tenía la Compañía deHuanchaca, dejando sus minas unidas a la costa por un ferrocarril de 642 kilómetros. Pero el gran capital invertido en el ferrocarril hacía indispensable, para ponerlo a salvo de las eventualidades de un fracaso minero, su prolongación hasta La Paz, capital de Bolivia, asegurándole así un rendimiento y porvenir seguros. El Gobierno de Bolivia, altamente interesado en ese proyecto dio la concesión hasta Oruro, garantizando un 6% sobre el capital que se invirtiera.

Esta prolongación se inició en 1889, terminándose en1892 los 314 kilómetros que hay entre Uyuni y Oruro, punto de término de este ferrocarril, pues la sección de Oruro a la Paz (233 ms.) y los importantes ramales ya en explotación, Oruro a Cochabamba (200 ms),Río Mulatos a Potosí (170 ms.) y Uyuni a Tupiza(200 ms.) de 1.00 de trocha, fueron dados al alemán Sindicato Speyer.Fue así como el ferrocarril de Antofagasta, nacido con la aspiración modesta de servir los acarreos de una Oficina salitrera en el salar del Carmenen 1873, lo cual queda de manifiesto con la escasa trocha adoptada de 0.76 m, fue extendiéndoseprogresivamente, a impulso de las necesidades, hasta llegar a convertirse en una vía internacional que se remonta desde la costa hasta alturas de 4.788 metros en 1910 contaba con más de 1.360 kilómetros en explotación. Respecto del uso del agua, para abastecerse desde Antofagasta hasta Calama la Compañía tenía que comprar el agua en las oficinas salitreras; laque además de cara, tres pesos el metro cúbico, erada malísima calidad. Desde Calama a San Pedro, distantes en 73 km, usaba la de los pozos de Ceres, agua sumamente nociva para las calderas, por su fuerte dosis de sal. El problema se solucionó trayendo del río San Pedro, afluente del río Loa, una cañería de 0.20 metros de diámetro y 2.500 m3 diarios de rendimiento, hasta el mismo puerto de Antofagasta; lo que dio un largo de 333 kilómetros a un desnivel de 3.300 metros. Ese trabajo se terminó en 1892, lográndose así una gran economía y posteriormente se construyó otra cañería igual y paralela a la anterior.